Lodo de amarre ABR adherente

Dispone de 2 cámaras completamente selladas donde residen los componentes electrónicos y mecánicos, un diseño que evita los daños provocados por la sal. Extremadamente ligero y compacto, con 200 mm de diámetro y un peso de 1,2-1,5 kg.
La versión ABR incorpora una tecnología revolucionaria que impide que el cabo se deslice cuando GRIPPY se inclina más de 90° durante la recuperación del ancla, lo que permite recuperar la boya de amarre directamente con el cabo sin necesidad de un gancho para embarcación.

El extremo del cabo GRIPPY está conectado al rombo del ancla, que se desenrolla automáticamente a medida que se hunde en el fondo marino.
La longitud del cabo se autoajusta en función de la altura del agua, de modo que GRIPPY flota siempre en línea con el eje vertical del ancla, lo que facilita su localización. Por la noche, GRIPPY enciende automáticamente sus balizas luminosas cargadas con energía solar (versiones LIGHT, HEAVY y ABR).
Si un ancla se atasca, puede liberarse recuperando la cuerda, que tiene una resistencia a la tracción superior a 500 kg (BASIC y LIGHT) o 1200 kg (HEAVY y ABR). Una vez recuperada el ancla, GRIPPY enrolla automáticamente el cabo colocándose bajo la proa de la embarcación. Para mayor comodidad, GRIPPY está equipado con un soporte de barandilla (versiones LIGHT, HEAVY y ABR) y una baliza amovible.